Capítulo 27.

•UNREACHABLE. -Capítulo 27.

Después de 5 minutos, dando vueltillas, miré el reloj, 10:20, ¡DIOS, JUSTIN! me venía a buscar a las once.
Y rapidamente me puse a preparar.
.............................
Me levante de la cama, y me metí a la ducha lo más rápido que pude, me dí una
de esas duchas de 5 minutos, salí, me enrollé, el cuerpo con una toalla, y lo primero q
ue hize es secarme el pelo, que si no después se me pondría todo estofado.
Después de secarme el pelo, me fuí a la habitación, y miré el reloj, 10:30, creo que me daba tiempo. Me vestí, arreglada, pero sencilla.
Una camisilla que me quedaba larga rosa, y por dentro una apretada negra, después unos vaqueros
largos, color blanco, con unos tacones negros, ya que Justin me había dicho que me llevaba a un
sitio, y no quería ir normalilla, de complementos, un reloj rosa, de los que se usan ahora y nada más.

Pincha aquí para ver esta foto.

Las 10:45, todavía me tenía que pintar y demás.
Fuí al baño, y me pinté poco, un poco de raya, rimel, y gloss, nada del otro mundo.
Me recojí el pelo con una coleta, bien alta, que hacía calor, y me deje unos pocos de pelos sueltos por
los lados, para darle un toque 'desenfadado'.
Tocaron al timbre. 11:00 de la mañana. Justin. Puntual.
Baje las escaleras, y vi que mis hermanos, estaban jugando en el jardín, y mi madre en el salón, mirando la tele.
Adiós ma, después vuelvo. -Dije cogiendo las llaves de casa, y el móvil, que estaban en la mesita de la entrada.
Vale, no vuelvas tarde. -Dijo ella, sin dejar de mirar la tele.

Abrí la puerta, y lo ví, con una sonrisa deslumbradora, tan perfecta...
Pero... ¿Qué hacía vestido así? ¿Y con una pelota de baloncesto?

Pincha aquí para ver esta foto.

-Guao, estas preciosa. Pero tienes que cambiarte. -Dijo.
-¿Qué? ¿Por qué?
-Porque con eso, no puedes jugar.
-¿Al baloncesto? -Pregunté.
Asintió.
Bufé.
-¿Y ahora que pasa? -Me preguntó.
-Pues que me tenías que haber dicho, que no me pusiera así, si no más de... deporte.
-Pero si no te cuesta nada cambiarte.
-Vaaaaaaaaale.
Fuí subiendo las escaleras, y Justin se quedo abajo, hablando con mi madre.
Subí a mi habitación, me puse unos pitillos negros, unas All Star blancas, con una camisa, ahuecada blanca,
de las normales, me quite el reloj, ya que no pegaba nada con lo que llevaba puesto, y me puse el mismo, pero en blanco.
Y sí, me fascinan, y lo tengo en varios colores.
Me dejo el pelo recogido, que para jugar al baloncesto, no se recomienda suelto.

Estaba a punto de llegar al salón, cuando hoy a mi madre decir 'No quiero que le hagas daño, ella se ve que esta muy enamorada de ti, si le hicieras algo, no lo superaría'.

En realidad, tenía razón...
……………………………………………..
Haber si un día de estos, os hago un pequeño maratón.
Osquiero♥

Capítulos 24,25,26.

·UNREACHABLE. -Capítulos 24,25 y 26.

¿Crees que saldría contigo si lo de antes fuera mentira? –Dijo él, para acercarse más a mi cara.
–Yo a ti te quiero, aunque llevemos tres días, todo este tiempo, actuando como amigos,
sin decirle al mundo que tú eres mía, solo mía. –Dijo acercándose más a mí.

Entre nosotros, solo había uno o dos centímetros de distancia, y entonces, si, los mato.
Con un dulce beso. Un beso seco. Sin saliva. Y al final, con un sonidito.

......................................
Nos separamos, él tenía ese brillo mágico en sus ojos color miel.
Él es mágico.
Yo solo le respondí, con un 'te quiero' insonoro. Solo con los labios.

Pasamos un rato mirando la puesta de sol, yo le tenía rodeado con el brazo, más o menos un poco más
arriba de su cintura, y el brazo de él, en mi hombro.
Hasta que cayó la noche.

Llegaron mis padres, y le preguntaron a Justin, si quería que se quedará a comer.
Él dijo, que primero tenía que preguntar a Pattie.
Pattie dijo que si, pero que no viniera a casa muy tarde, que mañana tenía que ir a ensayar al estudio,
que dentro de poco sacaba su disco 'Believe'.

Mamá dijo que haría spaguettis, Justin se alegro mucho, incluso demasiado.. normal, los spaguettis son
su comida favorita.
Subimos a mi cuarto, mientras que mi madre hacía la comida.
-¿Qué hacemos? ,dije sentandome en la cama.
-A mi se me ocurre una cosa. -Dijo acercandose a mi, con una mirada picará.
-No.. Justin.. eso no..
-¿Y porque no?
-Por que mis padres estan abajo.
-¿Y que tiene que ver que me conecte a twitter con tus padres?
-¿Twitter?
-Si, ¿Creías que era...? -Dijo, para estallar en carcajadas.
-Tonto.
-Malpensada.
-Idiota.
-Calla.
-No -me besó- quiero -otro beso-
Después de seguir un rato, con nuestras tonterías y besuqueos, Justin se conecto a twitter.
Siguio a unas cuantas beliebers, twitteo un poco, RT un ratillo, y contesto a unos mensajes.
Antes de desconectarse, puso:

Pincha aquí para ver esta foto.

·Con una chica muy especial, @CrazyBeliebbers te quiero.

Al momento, cientos de respuestas, RT's, menciones, aparecieron.
Preguntando ¿Quién es ella? y más cosas por el estilo.
Cada segundo habías más respuestas, más y muchísimas más.
Cerró sesión.
Nos miramos.
-Guau. -Dije yo.
-Ya. -Dijo él, todavía mirando la pantalla.
-Nunca había visto tantos RT's en tan pocos segundos, se ve que te quieren, y que estan pendientes a
todo lo que haces.
-Ese es el problema. -Dijo, y su cara se trosno a triztesa, o puede que preocupación.
-¿Por? -Dije, acariciandole la mejilla.
-Lo que tu has dicho 'Estan pendiente a todo lo que haces', eso me preocupa, que no tenga ni un minuto libre, ya
vistes lo de antes en el coche, o si quiero ir a algún lado con mis amigos, o con tigo, con mi novia.
-Per... -me cortó. -Deja terminar. -Siguio diciendo él.
Yo solo asentí.
-Aunque yo sabía que este mundo era díficil, yo lo elegí, elegí ser quien soy, a todo este mundo, a la fama, a todos
y por supuesto, a personitas como tú, a las 'Beliebers' que se que me quieren, que me quieren conocer, o al menos
si estuviera en mi mano, seguirlas a todas en twitter, así estoy más cerca de ellas. Porque yo, las quiero, sin ellas
no hubiera llegado tan lejos. Pero en mi corazón sigo siendo Justin Drew, el pequeño, ya no tan pequeño niño de Stratfor.

Yo, sinceramente, me quede sin palabras, sin nada que decir.
Se había expresado tan bien, tan... tan... adorable.

-Eres jodidamente precioso. -Dije, para después darle un piquito.
-Lo sé.
-Creído.
-Pero guapo.
-Lo sé.

Al momento, mi madre nos llamó para que bajaramos a cenar, bajamos...
Y claro, mi hermana todavía no había visto a Justin, ni le había hablado de él.
Se puso a gritar.
Después de calmarla, y decirle a Justin lo mucho que le quería, empezamos a comer.
Mi hermana, no dejaba de mirar a Justin.
Me incomodaba, se que es pequeña, pero... paranoyas mías.
Mi hermano más bien pasaba de él, y estaba pendiente a los dibujos que estaban dando en la tele.

-Estaban buenisimos, dijo Justin.
-La verdad es que sí. -Dijo mi padre.
-Tampoco es para tanto. -Dijo mi madre.

Yo todavía estaba comiendo, al igual que mis hermanos, no es que fueramos lentos para comer, si no que Justin y mi padre,
cuando una cosa le gusta, pues se la come rápido.

Terminamos de comer, recojimos los platos, y limpiamos la mesa.
Eran las diez de la noche, y Justin ya se tenía que ir, Pattie se lo había dicho, 'no vengas tarde'.

Fuimos al garaje, él tenía que sacar su coche.
Después de sacarlo, antes de irse, se paro en frente de mi casa, y me hizo el gesto con la mano de que me
acercara, yo estaba en la puerta.
Deje la puerta entreabierta, dejando un huequito.

Me acerqué al coche, y bajo la ventanilla del todo.
-¿Qué pasa? dije yo, para poner mis dos manos, pegadas sobre el borde de la puerta, donde esta la ranurita del cristal.
-Pues que todavía no me has dado mi beso de buenas noches.
-Tonto.
-Quiero mi beso.
-Que si, tontoooo.
Abrí la puerta del coche, me senté, y nos dimos un beso, durante un tiempillo largo, nos separamos por falta de aire.
-Vete ya, que tu madre te estará esperando.
-Vale.
Abrí la puerta, e iba a salir, pero el me cogio el brazo, y me dió otro beso.. 10 segundos, 15..20..
Nos separamos.
-Venga ya..
Rió. -¿Mañana tienes algo que hacer? me preguntó, entusiasmado.
-No, ¿Por qué?
-Te quiero llevar mañana a un sitio.
-¿A cual?
-Sorpresa.
-Jo. pusé un puchero.
-No te pongas así, mañana lo sabrás. Sobre las once estoy en tu casa.
-Vale.
Por último, nos dimos un piquito, de esos sonoros.
Salí del coche, y me dirigí hacía la puerta.
Allí, lo ví, despidiendose con la mano.
Arrancó, y se fue.
Me metí en casa, y ví que mis padres estaban colocando la compra, y decidí ayudarles.
Después de terminar de ayudarles, subí a mi habitación, me bañé, me puse el pijama, y me sequé el pelo.
Entré en mi habitación, y me conecté un poco a twitter, y facebook, y claro, me lo esperaba, muchísimos más seguidores, y también en
facebook, peticiones de amistad, etiquetadas en fotos, con Justin en el coche, y con los chicos en el parque.

Cerré sesión, en todo, facebook y twitter.
La verdad, no tenía ganas de mirarlo todo.
Me acosté en la cama, y me pusé a pensar todo, ¿Que sería lo de Justin? me puse un rato a darle vueltas, hasta que me concentré en
otro asunto, que me vino directo, como un remordimiento.
Eric.Eric.Eric.Eric.Eric y más Eric, no podía estar peleada con él, él es como mi hermano, confidente, llamadlo como querais.
Se que lo de la última semana, había estado mal, de no haber aclarado ese beso, que para mi al principio fue muy importante.
Pero es que Justin, joder, es Justin.
No puedo mirar a Eric, y estar como si no hubiera pasado nada. en mi cabeza, se concentraron tres palabras, que pasaron una y mil veces
por mi mente. 'Tengo que solucionarlo'.
Y con esas palabras me quedé dormida.

Me desperté, los rayos de luz, caían directamente en la cama, aunque tuviera la persiana bajada.
Arrg, como lo odiaba.
Después de 5 minutos, dando vueltillas, miré el reloj, 10:20, ¡DIOS, JUSTIN! me venía a buscar a las once.
Y rapidamente me puse a preparar.

Capítulo 1.

Introducción:
Hola, me llamo Annie Truscott , voy al instituto Blue Lake estoy en 3º
Y tengo 16 años y vivo en Stradfor, Ontario, por si no lo sabéis
está en Canadá, vivo desde siempre hay, y siempre me ah encantado..
Soy morena, ojos azules y pelo largo de un color castaño como Justin Bieber,
Oh si, JUSTIN BIEBER, mi gran ídolo (igual que en la realidad) es el chico más
guapo, mas talentoso, y más sjkksjakjsaakljsk del mundo, no hay palabras para
describirlo, yo pensaba que al estar en Stradfor donde él vive me lo encontraría pero
no ah sido así.. bueno volvamos a mi mundo, ya que no lo conoceré nunca, pero como
él dijo NEVER SAY NEVER, aunque esas palabras para mi no funcionan.
Vivo en una casita en la calle Traskfor, un nombre raro ¿verdad? vivo con mis padres
Isabela y la llaman Bella y mi padre Marcos, mi hermanito y mi hermanita pequeña
más monos, los quiero, pero a mi hermano no tanto cuando se pone a hablar de que
Justin nosequé nosecuanto.. Mi hermana se llama Lucía y mi hermano Lucas..
Tengo un perro que se llama Sami, se lo puse por el perro de Just que se llama Sam.
¿Mis amigas? Carol, Andrea aunque la llamo Ann, María, Espe y más gente pero ellas
son las más importantes que hay de momento.
¿De chicos? ¿Amigos? Drew, Christian (no es Christian Beadles) , David y Richard pero
lo llamamos Richi, bueno que en total es una pandilla bastante grande, somos ocho.
El chico que me gusta, ¿que me tiene loca? Se llama Eric, alto, pelo a lo Justin..
Ojos verdosos y viste súper bien, generoso.. gracioso.. Resumen:
TODO LO QUE UNA CHICA DESEARÍA TENER COMO NOVIO..
Pero yo que soy para él? Si si, su novia pensareis, pues no, su MEJOR AMIGA.
Que gracioso, él me ve como su mejor amiga.. El amor es idiota, yo por él y el por otra,
o eso creo.
Mis amigas me dicen que cualquier chico desearía estar conmigo, que tengo un tipazo,
soy graciosa, inteligente, lista, guapa.. blablablá, si, cualquier chico menos el que me
interesa, claro..

[Bueno, pues aquí va como un día sin darme cuenta cambio mi vida].

·UNREACHABLE. -Capítulo 1.

Lunes, 06:00 de la mañana bipbibbpib, el despertador, demasiado frío para levantarme
aunque tengo una sabana, una manta y un edredón, normal estamos en invierno,
esta nevado, será que nevó anoche, aunque hago un esfuerzo en levantarme ya que el
instituto empieza a las 8:00, pero necesito mi tiempo para arreglarme y hacer todas esas
cosas que se hacen por la mañana...
Me levanto, voy al baño que está al lado de mi habitación, voy tiritando, nosé porque
hace tanto frío, por Dios.
En fin que llego al baño hago mis necesidades, menos mal que deje anoche la ropa pre-
parada si no llegaría tarde, me visto, me lavo los dientes, la cara, me voy despejando
un poco, ya que tengo un sueño increíble porque anoche llegue un poco más tarde de lo
previsto porque me fui a casa de una amiga a hacer un trabajo, y al final me lié. En fin,
sigo con mis cosas, me lizo un poco el fleco, y el pelo también que lo tengo que parece
una leonera, mi madre me dice que ojala lo tuviera como lo tengo pero ella no entiende,
cuando termino me hago una coleta alta, alta, alta, porque hace viento y seguramente
se me enredará el pelo y después para peinarlo no me queda nada...
Bajo al salón (casa de dos pisos), y veo que papá esta sentado en la mesa, mientras
mamá esta preparando el desayuno, vete a saber por lo que le ah dado esta mañana de
hacer, es tan imprevisible, me siento, y me saluda papa: -Hola, menos mal que te has
levantado, si no te apuras en desayunar llegarás tarde como siempre- mi padre como
siempre dándome ánimos, entonces se oye desde la cocina: -Hola, hija, ¿sabes lo que
te eh hecho esta mañana de desayunar? Tortitas, como a ti te gustan- Yo: Mamá, sabes
que por la mañana no tengo hambre- -Vale, hija, yo que sé pensaba que te haría ilusión..-
-No es eso, ya me las comeré el fin de semana, ¿vale? -Vale- Papá estaba concentrado
leyendo el periódico, seguramente la parte de los deportes, como siempre.
Entonces me levanto de la mesa, cojo un vaso, abro la nevera, cojo la lache, la pongo en
el vaso, la meto en el microondas, la pongo a 1 minuto más o menos, y cuando pasa
la cojo y le pongo el cola-Cao.. Entonces mientras me la voy tomando miro el reloj y veo
que son las 7:45.. -Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah- Mamá: - ¿Qué te pasa hija? –Qué, que
me pasa? Pues que faltan 15 minutos para que sean las ocho, ¡¡voy a llegar tarde!!
Papa: -Hija, no te apures que siempre sales de casa a esta hora y nunca llegas tarde.
-Bueno, hija corre, que no llegas. –Vale, mamá.. Adiós, os quiero. Mis padres me dijeron
Al unísono: Nosotros también- Subo a mi cuarto, cojo una bufanda y la mochila y bajo
Las escaleras lo más rápido posible. Salí por la puerta corriendo, caminando al instituto se llega
En 15 o 20 minutos, así que me hecho a correr, mientras voy por medio camino, oigo
Alguien que me llama, entonces me giro, y claro, esa cara me alegra el día, Eric, él
También iba corriendo, supongo que también llegaba tarde, entonces le espero a que llegue
Donde estoy yo, cuando llega me dice:
-Hola, cariño, ¿cómo estas?
Pensamiento: Claro, me dices cariño de amistad. Yo si que te lo diría pero no exactamente
De cariño, claro.
-Hola, Eric, pues muy bien ¿y tú?
-Bien, que me eh quedado dormido… Y llegaba tarde, y entonces te eh visto…
-Ah vale, Eric, ¿porqué estabas corriendo?
-Por que llegaba tarde…
-Ostiaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, es verdad que van a cerrar el instituto…
Entonces nos echamos a correr cuando estábamos llegando, asfixiados, no exagero,
De verdad, parecía que me iba a dar algo… Entonces me paro en seco le cojo del brazo
Y le digo: -Eric, ¿porqué siempre me dices cariño, cada vez que nos vemos?
Se puso nervioso, y a tocarse el pelo, se que se puso nervioso, porque siempre que esta
Así se toca el pelo… Y mira para otro lado.
-Bueno, emmm, pues nose, eres mi mejor amiga, te tengo cariño y por eso te lo digo…
-Ah, vale
-¿Porqué, me preguntas esto, aquí, ahora mismo, cuando llegábamos tarde?
-No, por nada por saber, tenía esa curiosidad.
-Vale.
Y mire al suelo, con pena, pensaba que me diría otra cosa, que se atrevería a decirme lo
que tanto tiempo llevo esperando oír de su boca, que le GUSTO, que ME QUIERE desde
hace tiempo, pero el dicho dice: De ilusiones se vive.
Empezamos a caminar, esta vez mirando al suelo los dos, antes de llegar al instituto que
todavía las puertas estaban abiertas, me paro en seco me cojío de las dos manos y me
Dijo:
-Bueno, respecto a lo que me dijiste antes, yo quería decirte que..
Piiiiiiiiiiiririririri , sonó la sirena.
-Bueno, Eric, ya me dirás otro día o más tarde lo que me tengas que decir, llego tarde a
Lengua, Adiós, cariño, y le sonreí, él intento dibujar una sonrisa…
[mientras me iba alejando, me dijo]
-Adiós, después te veo.
Y le hice una seña con la mano despidiéndome de él. Me gire una vez más y hay estaba
todavía.

Capítulo 23.

•UNREACHABLE, -Capítulo 23.


Entramos, y le coji de la mano, ¿todo esto estaba pasando muy rápido? creía yo.
Salimos al salón, y sus miradas se concentraron en Justin.
____aquí nos quedamos____
Nervios. Los tenía. Al pensar que dirían de él.
Mamá, Papá, él es Justin, mi novio. –Dije nerviosa.
Encantado. –Dijo extendiéndole la mano a mi padre.
Papá, se la estrecho sin decir nada.
-Emm, bueno, Justin esta es mi madre, Bella, y mamá este es Justin.
-Encantada. –Dijo mi madre, para proceder, a darle dos besos.
Nos quedamos hablando un rato en el salón, mi madre hablaba con Justin como si le conociera de toda la vida, pero mi padre,
siempre es más duro, es como el dicho 'es un hueso duro de roer'.
Tendría que darle tiempo, es la primera vez que se ven.
Bueno, la primera vez, que Justin ve a mis padres, porque al ser Justin famoso, bueno... ya sabéis.
Estábamos bien, no había tensión. Un poco por mi parte. Pero nada.
Pero algo lo estropeó. Mi padre. Con preguntas. Un tanto incomodas.
Dime, Justin... ¿Cuantas novias has tenido? -Dijo mi padre.
2, la primera fue la más importante para mi, pero la última nada serio. -Afirmo él.
Bien. -Dijo serio. -Entonces, mi hija, ¿es algo importante para tí? -volvió a decir serio, y con la mirada fija a Justin.
Pues claro. -Dijo Justin, y esbozó una gran sonrisa. -Aunque llevamos solo 3 días, ya la quiero muchísimo.
Después de eso, me quedé un poco 'atontada', escuchar como tu ídolo le dice a tu padre 'La quiero muchísimo' es algo que nunca
esperas que pase. Pero, más bonito era oírselo decir a el chico perfecto, aunque el dicho dice 'lo imperfecto hace, que seas perfecto'.
Con todos sus errores. Él, Justin Drew, es perfecto.
Seguimos un rato, hablando, a mi padre, cada vez parecía que le caía mejor Justin.
Hombres, se comprenden unos a otros.
Bueno, yo le voy a enseñar a Justin la casa. -Dije, cojiendole a Justin la mano, y empezando a subir las escaleras.
Vale, pero nosotros nos vamos a hacer la compra, tus hermanos están en casa de Lidia (una amiga de mi madre), y por favor, saca
a Sami a pasear, que un día de estos se pone depresivo. -Dijo mi madre, medio-riendo, por lo del final.
Que si. -Dije subiendo las escaleras.
Bueno, pues pasamos, así, le enseñe, el baño, la habitación de mis padres, la cocina, el jardín, y para terminar, mi cuarto...
él ya lo había visto todo, pero solo el interior, faltaba el balcón, y el pequeño baño que tengo dentro de mi habitación.
Salimos al balcón, ya eran casi las siete, y ya se estaba poniendo el sol. Una sola palabra. Precioso.
Las nubes, como encajan perfectamente, para hacer unos colores, que son inimaginables.
Y después parece que se mezclan, con el color del cielo, que esta en un tono morado, casi negro, y el último color, el que desprende
el sol, que no es ni blanco, ni amarillo, ni nada, es como un amarillo intenso, pero apagado.
En fin, precioso.
Los dos. Solos. Contemplando una puesta de sol. Mi cabeza, en su hombro. Mágico. Todo es mágico.
Y entonces recordé, la frase de antes, 'Aunque llevemos tres días, yo la quiero muchísimo'.
Le tenía que preguntar, si lo había dicho de verdad, o por la presión, de que estaba con mis padres, hay enfrente.
-Oye. -Dije, mirándole a los ojos. -¿Lodeanteseramentiraoverdad? -Dije rápida, creo que no me entendió.
¿Qué? -Dijo riendo, y quedándose, con una cara de, WFT.
-Que si lo de antes era verdad, o mentira. Dije, para agachar la cabeza.
Él, con su mano, me cojio, por la barbilla, y me levanto la cara.
¿Crees que saldría contigo si lo de antes fuera mentira? –Dijo él, para acercarse más a mi cara. –Yo a ti te quiero, aunque llevemos tres días, todo este tiempo, actuando como amigos, sin decirle al mundo que tú eres mía, solo mía. –Dijo acercándose más a mí.

Entre nosotros, solo había uno o dos centímetros de distancia, y entonces, si, los mato. Con un dulce beso. Un beso seco. Sin saliva. Y al final, con un sonidito.

Capítulo 23.

·UNREACHABLE. -Capítulo 23.

Bajamos, y subimos en el coche, menos mal, que no había ningún paparazzi, si no tardaríamos en llegar.
Nos montamos, y fuimos lo más rápido posible, pero sin pasarse.
Llegamos al parque. Justin aparcó. Y allí se veían a los chicos, haciendo sus tonterías.
____aquí nos quedamos____
Sí, se veían desde lo lejos, Christian, Ryan y Chaz, como siempre, haciendo tonterías, Espe, María y Carol
hablando entre ellas, y Ann, coqueteando con Jeydon, supongo que saldrían juntos, es evidente.
Nos acercamos.
Yo salude a todos, con dos besos, Justin a los chicos con su típico 'choque de manos' y a las chicas con
dos besos, normal, ¿no?
Estuvimos hablando un rato, divirtiéndonos, hasta que Christian interrumpió.
Hey chicos, ¿Cuento un chiste? -Dijo animado.
Todos rechistaron.
Pues ahora lo cuento. -Dijo Chris un poco molesto, pero no enfadado -Pues esto...
¿Qué le dice un globo a otro?
Todos negamos.
¡Nos vemos en el aire!
Dijo y al momento, estalló en carcajadas.
Nosotros nos miramos, y empezamos a reír, no por el chiste, si no de la manera que reía Chris, es contagiosa.
Después de pasar un rato riendo, haciendo bromas, 'divirtiéndonos', se hizo de noche y cada uno nos fuimos a su casa.
Justin como siempre insistió en llevarme.
Después de unos 10 minutos, llegamos a mi casa, era temprano... las 21:24, para ser exactos.
Le dije a Justin que si quería entrar.
Justin, es temprano, ¿Quieres pasar? -Dije asomada, por la ventanilla del coche.
Claro.
Le dije que si quería podía poner el coche en el garaje, que era grande, y cabían unos 3.
Entré en casa, salude a mama y a papa, y a mis hermanos, que estaban viendo todos juntos la tele.
Entré al garaje, coji el mando, y le dí, la puerta iba subiendo más lento, que rápido, se podía decir.
Justin entró el coche.
Y debéis imaginar, que el todavía no conoce a mis padres.
¿Preparado para conocer a mis padres? -Dije nerviosa.
Creo que yo estaba más nerviosa que él.
El solo me respondió con un simple ‘Si’, y esbozó una gran sonrisa.
Entramos, y le coji de la mano, ¿todo esto estaba pasando muy rápido? creía yo.
Salimos al salón, y sus miradas se concentraron en Justin.

·UNREACHABLE. -Capítulo 21.


Cuando salimos, los flashes nos cegaban, se pegaban al coche como lapas, preguntaban, micrófonos, cámaras, todo.
Preguntaban de todo, ¿Es tu novia nueva? ¿Desde cuando? ¿Cómo la conociste?
Seguimos sin hacerle caso, hasta que uno, ya se paso de la ralla.
___aquí lo dejamos___
Se paso de la ralla, se puso enfrente nuestra, no nos dejaba avanzar, ¿vosotras creéis esto normal? ¿Qué se os ponga delante del coche, un tío al que no conoces, y siempre te esta atosigando? A que no, pues no.
Justin bajo la ventanilla, de repente más de diez micrófonos se posaron cerca de su boca.
Saco un poco la cabeza, y dijo -¿Te puedes apartar?
Espera un momento, solo queremos saber una cosa. –Dijo quitándose del medio, y poniéndose en la ventana.
Justin me miro, y le hice una mueca, como ‘da igual’.
Vale, pero rápido. –Dijo él. Un poco ¿molesto?.
Hay que entenderlo, están todos los días, horas, minutos, segundos, esperando a una exclusiva de él, es como si compitieran entre ellos para ver quien saca primero una palabra suya o una foto.
¿Es tu nueva novia? –Dijo él paparazzi, que se puso antes fuera del coche.
-Justin suspiró. –Si. Adiós.
Al decir esas palabras, todos se juntaron, parecía que querían saber más, flashes y más flashes.
Entonces, salimos en dirección a mi casa.
Que mundo.
Yo creo que no lo aguantaría tanto tiempo.
Es un gran peso, y una gran responsabilidad.
Por el camino, íbamos en silencio, a mi casa en coche se llegaba en unos cinco minutos.
Os lo dije.Vivía cerca.
Llegamos a mi casa, y el primero que me saludo fue Sami, mi perro, se ve que quería que le saque a pasear, el pobre, seguramente mi madre no ah podido sacarlo.
Hablando de eso, ¿Y mi madre? ¿Y mis hermanos?
Da igual, tenía que prepararme. Eran las 18:30, no me daría tiempo.
-Bueno, yo me voy a bañar, si quieres algo me lo dices. –Dije.
-Justin asintió.
Cuando estaba subiendo las escaleras, Justin grito: Ponte guapa.
Me fui a mi cuarto, coji ropa interior, y también lo que me iba a poner.
Una falda rosa un tanto fuerte, pero no mucho, con una camisa, de flores, que eran de diferentes colores, y unas bailarinas negras.

Pincha aquí para ver esta foto.

Entré en el baño, me quite la ropa, la dejé en el cesto de la ropa sucia, entré en la ducha, puse el agua casi fría, hacía calor, mientras me bañaba oí como algo se rompía.
¿Qué habría sido? Me terminé de bañar lo más rápido posible, terminé en unos cinco minutos escasos,
Salí de la ducha, me sequé el cuerpo, me enrollé el pelo con una toalla, y me vestí.
Y salí, ¿Justin? -Dije unas cuantas veces, pero no contestaba.
¿Y si el ruido que hoy, es que le había pasado algo?
Entré en mi cuarto, y me quité la toalla del pelo, dejándola en la cama.
Baje al salón, y no lo vi, lo mismo que en la cocina, fui al jardín y al único que vi. fue a Sami tomando el sol, que bien vive este perro.
Subí de nuevo a mi habitación, lo llamé unas cuantas veces, hasta que sentí, unas manos taparme los ojos, como se notaba de que era él.
¿Dónde estabas? –Pregunté.
Observando como te bañabas. –Dijo con una sonrisa picará.
¿QUÉ? –Le pregunté alterada.
¿Me estaba tomando el pelo, no?
-Pues lo que oyes.
-¿Broma?
-No.
-Si.
-No.
-¿Empezamos otra vez? –Dije volteándome, y quedándome enfrente de él, a escasos centímetros.
-Que no tonta, me escondí.
Dijo dándome un pico.
-¿Y eso?
-Te quería dar un susto.
-Muy bonito, ¿no? Bueno, mira, me tengo que terminar de preparar.
Dije quitando sus manos de mi cintura, que había puesto anteriormente.
-Vale. Dijo haciendo un pucherito.
Me fui al baño, me peine, me sequé el pelo, y me lo deje liso, como siempre, pero me puse el fleco a un lado. Me maquille solo un poco, un poco de raya, rimel, y un poco de sombra, para los labios, un poco de gloss, sin ningún color, solo brillo.
Justin me esperaba en el pasillo, entré a mi cuarto, coji el bolso, metí el móvil, cartera, brillo, de todo un poco, me eché un poco de mi querido Someday, es extraño, mi novio, que bien suena, es raro decir tengo el perfume de mi novio Justin Bieber, nunca antes lo hubiera imaginado.
Salí.
-Fiuu, fiuu. –Silbo Justin.
-Calla, tonto. Si tu estas más guapo.
-Si seguro, ahora me quitarás todo el protagonismo. –Rió.
-No creo.
-Si.
-No.
-Si.
-No.
-Bueno, vámonos ya, que son las 18:50.
Si exacto, solo han pasado veinte minutos, entre que me bañé, arregle, busqué a Justin, raro ¿verdad?.
Bajamos, y subimos en el coche, menos mal, que no había ningún paparazzi, si no tardaríamos en llegar.
Nos montamos, y fuimos lo más rápido posible, pero sin pasarse.
Llegamos al parque. Justin aparcó. Y allí se veían a los chicos, haciendo sus tonterías.

Capítulo 19.

·UNREACHABLE. -Capítulo 19.


Nos acercáramos cada vez más, podía sentir como millones de mariposas revoloteaban en
mi barriga, yo aquí, apunto de besarlo, a Justin Bieber.

**
Dios, cada vez más cerca, supongo que él me quería besar y yo a él, así que no había ningún
impedimento, digo yo.
Nos acercamos, hasta fundirnos en un beso... no fue un lugar romántico como en el de las
películas, pero para mí sí.
Después de unos minutos, creo yo... nos separamos, nos miramos a los ojos, el tenía un brillo
increíble, al igual que yo sonreía de oreja a oreja.
¡Justin! se oyó gritar desde el salón, joder, vaya manera de arruinar un momento así.
-Emm, esto... creo que me llaman. -Dijo él.
-Bajemos. -La verdad es qué después de este beso... creo, que no volveríamos a estar igual.
Él asintió.
Mientras íbamos bajando las escaleras, antes de llegar, me dijo
-Nuestro segundo beso, muy romántico.
Espera, ¿Qué? ¿Segundo?
-¿Cómo que segundo? ¿Cuando? ¿Por qué? ¿Dónde?
-Carcajeo.
Pues, si, segundo, el otro día en el botellón, porque estabas borracha, y donde, cuando
Fuimos a dar una vuelta por la playa.
Dios que vergüenza. -Dije agachando la cabeza.
Él solo soltó una pequeña carcajeada.
Cuando llegamos al salón, él me cojio de la mano. Sentí como mi corazón se revolucionaba a más de miles de latidos por segundo.
Yo lo mire.
Él me miro, y asintió.
¡Oh! ¿Eso significada lo que yo estaba pensando? De verdad, ¿era eso?
Me alegre muchísimo.
Los chicos estaban viendo la tele.
Espera… ¿Qué? ,Espe sentada encima de Chazito. (Si, me hace ilusión llamarle así).
En los últimos diez minutos que estuve arriba, aquí habían pasado muchas cosas, la verdad.
No se percataron de que nosotros estábamos allí.
Los chicos estaban en el suelo, mientras que las chicas en el sillón.
En excepción de Espe, que estaba con Chaz.
Estaban viendo las noticias.
Nos quedamos observándolos a un lado del sillón, y nada no nos miraban.
-Justin carraspeo.
Y entonces si nos miraron, nos miraron las menos, y siguieron a lo suyo.
Bueno, ¿Qué? ¿No se daban cuenta?
Nos quedamos un rato plantados, mirándolos a ellos.
-Ya sabemos que estáis saliendo, si se veía venir. –Dijo Chaz, sin dejar de mirar la tele.
Todos asintieron, e hicieron ese sonido que se hace, como si pronunciaran un ‘Ajam’.
Sentí que mis mejillas se ruborizaban.
¿Tanto se notaba? ¿De verdad?
-Tía, venga déjame un sitio. –Dije apretujando a las chicas.
-Todas rechistaron.
Justin se sentó en el suelo.

Nos quedamos un rato viendo la tele, echaban una película un tanto ¿graciosa? Si.
La película termino a las cinco, más o menos, ya que duraba unas dos horas.
Todos decidimos que quedábamos las siete, en la plaza de siempre.
-Que nadie se retrase. –Dijo Justin.
-Que no pesado. –Dije.
-Reímos.
Cada uno se fue a su casa, como todos vivíamos en el mismo vecindario (barrio),
Pues se podía ir cada uno a pie.
Justin insistió en llevarme, y eso, que era la que más cerca vivía.
Después de un rato, convenciéndolo de que no hacía falta que me llevará, el seguía tan tozudo como siempre. No hay remedio. Pero eso, es lo que le hace tan especial.
Él se fue a bañar, ya que todavía estábamos con la ropa de anoche, cuando el botellón.
Yo mientras, lo esperé en su cuarto.
Morado, morado y más morado. Le encanta.
Os describiré el cuarto como pueda, tiene un armario, que parece un laberinto, con montones de sus amadas supras, vans, tenis normales, zapatillas, algún que otro mocasín, y algunas cholas, (a lo canario)… un montón de gorras de diferentes marcas, NY, vans, normales, y demás, pantalones de todos los tipos de colores, camisas normales, otras con dibujos, y unas que eran demasiadas ¿sexys?, de esa que son súper ajustadas, no se si lo entenderéis, chaquetas, jerseys, gorros, en fin de todo.
Después de un rato curioseando, encontré una foto, una de él, con más o menos 13 años, con una chica, supuse que sería Caitlin, su exnovia.
Y al lado, una de él pequeño, con un hombre, se me hacía familiar de verlo por algún lado, iba con unos tatuajes, y estaban en la playa.
Y así seguí un rato mirando, hasta que vi, entrar a Justin, por la puerta, iba con una toalla blanca, atada a la cintura, ¡Oh, dios mio! –Pensé.
Las gotas, del pelo le caían por todo el cuerpo, eso lo hacía más asquerosamente adorable.
-Puedes salir, me tengo que vestir. Dijo él, con una sonrisa picará. –Aunque si quieres puedes quedarte.
¿Qué? , no… –Dije poniéndome roja.
-Te has puesto roja. –Dije el riendo.
-¡No!
-Si.
-No.
-Si.
-No.
-No. –Dijo.
-Si. –Mierda eh caído.
-Lo ves, como sí. –Dijo él, con una cara, ¿divertida?.
-Idiota.
-Lo sé, pero me quieres. –Dijo, con unos aires de grandeza.
-Eso es lo peor, que aparte de tus tonterías, te quiero.
-Si es que lo sabía.
Dijo dándome un beso-pico, de esos que te dejan con ganas de más.
¿Solo eso? –Refunfuñe divertida.
-Bueno, si mi novia, quiere más, ¿que se le va a hacer?
-¿Tu novia?
-Si, ¿Por qué?
-Es que yo no soy tu novia.
Su sonrisa, se le fue de la cara.
-Todavía no me lo has pedido formalmente. –Dije.
Soltó como un pequeño suspiro.
-Ah, que… era… eso… -Dijo entrecortado.
-Si, ¿Qué iba a ser?
-Nose. Bueno, a lo que vamos… -Se puso de rodillas- Annie, ¿Quieres ser mi novia?
-Claro, tonto.
Se levanto, y me dio un beso, en condiciones, se podría decir.
Después de unos minutos, sentí como algo caía en mis pies, y sí, se le había caído la toalla.
Rápidamente me gire.
-¡Tápate, Justin! –Dije un poco alterada.
Dios mío, que situación.
Él, estallo en carcajadas.
Me tape los ojos y como pude, llegue a la puerta, antes de salir de la habitación, mire de reojo, y lo vi, agachándose a coger la toalla, madre mía… que culo.
Salí, y cerré, la puerta, a los cinco minutos, salió él, con unos pantalones más o menos cortos, que le llegaban por la cintura, de fondo blanco, y con rallas que se mezclaban en diferentes colores, (cuando fue a Miami), unos vans verdes, me pareció extraño que no llevará supras, una camisa normal, lisa, de color verde, igual que los vans. Una gorra verde que tenía delante una ‘T’, se fue al baño para secarse el pelo, termino de arreglarse, ponerse alguna que otra pulsera, y demás.
Durante todo este tiempo había pasado casi una hora. Ya eran las seis y quedamos a las siete, no me daba tiempo.
Así que apure a Justin.
Bajamos al salón, y Justin, que no encontraba las llaves del coche.
Genial, todo estaba siendo genial.
A los chicos que digamos no les gustaba que la gente fuera impuntual, para ellos era como una falta de respeto.
Las encontró estaban en el cajón de la mesita, que hay al entrar en su casa.
Entramos en el garaje, entramos en su coche, le dio al botoncito del mando, que es para abrir la puerta.
Cuando salimos, los flashes nos cegaban, se pegaban al coche como lapas, preguntaban, micrófonos, cámaras, todo.
Preguntaban de todo, ¿Es tu nueva novia? ¿Desde cuando? ¿Cómo la conociste?
Seguimos sin hacerle caso, hasta que uno, ya se paso de la ralla.

Capítulo 18.

·UNREACHABLE. -Capítulo 18.


Cuando estaba en la habitación entrecerré un poco la puerta.
Y lo volví a llamar.
**
Un pitido… dos… tres… cuatro…
Parecía que no iba a contestar, pero cuando lo iba a apagar contestó.
Puse el altavoz, y me tumbé en la cama. Bocarriba.

Él: -Annie…
Yo: -Lo siento, por lo de antes.
Él: -No pasa nada.
Yo: Eric… ¿Qué querías?
Eric: -Quiero que quedemos esta tarde, para aclarar las cosas.
Yo: -Pero la verdad es que yo no quiero.
Eric: -¿Porqué?
Yo: -¿Cómo que porque? El otro día por la tarde, te enfadaste muchísimo, y sin ningún motivo, tú y yo nunca hemos sido pareja, y como te comportaste no creo que salgamos nunca.
Eric: Tú sabes que me enfade, porque no me elegiste.
Yo: -¿Y porque te tendría que elegir a ti? A lo mejor el que me gusta es Justin y no tú.
Silencio.
Más silencio.
Nadie respondía.

Después de las últimas palabras que dije, colgó.
Alá, ahora si que la había hecho buena.

Dejé el móvil en la cama, y me dispuse a salir.
Pero lo vi, a Justin, en el marco de la puerta, mirándome fijamente.

-¿Has estado espiándome? –Dije seriamente.
-No, bueno… si. Pero tú tienes que responder a unas cuantas preguntas. –Dijo entrando en la habitación, y sentándose en la cama.
-Venga, siéntate. –Dijo, dando unas palmaditas en la cama, indicándome que me sentará a su lado.
Fui, y me senté, yo no le miraba, si no, al suelo.
-¿Y ahora qué? –Dije entrecortada.
Sabía que lo había escuchado todo, sabía que me preguntaría por:
‘lo mejor el que me gusta es Justin y no tú.’

Y ahora no sabía que responderle, claro… que me gusta.
Es divertido, sensible, sabe tratar a una mujer, es bueno con sus amigos, y a pesar de la fama que tiene, no se le ah subido a la cabeza como a muchos.
Se que algunas veces lo han podido agobiar mucho, y ah respondido de forma no muy agradable… Pero él, es así, es su mundo.

-Vale… ¿Te gusto, no? Por lo que has dicho cuando estabas hablando con Eric.
-Bueno… si. –Dije poniéndome roja, y mirando al suelo.
-Venga, Annie… no hay porque avergonzarse, dijo cojiendome por la barbilla, y quedándome mirando fijamente a sus ojos.
… Cuando dos personas sienten lo mismo, lo demás no tiene nada que ver. –Seguía diciendo.
-¿Dos personas?
•Él asintió.

Espera un momento, haber… esto es ¿nos estamos declarando mutuamente?
Yo: -Ah entonces, yo también te gusto.
Justin: -Se podría decir de ese modo. –Dijo mientras se acercaba.

Nos acercáramos cada vez más, podía sentir como millones de mariposas revoloteaban en mi barriga, yo aquí, apunto de besarlo, a Justin Bieber.

Capítulo 17.

·UNREACHABLE. -Capítulo 17.


Me acosté a su lado, con la cabeza en su pecho, estábamos los dos un poco sudados…
Estuvimos reponiendo fuerzas, hasta que me dijo:
-Esto nunca lo olvidaré, eres perfecta. Te quiero.
Y me dio un beso en la frente.

FIN DEL FLASHBACK;
……………………………………………………….
**
-_____Annie- (Si no lo recordáis, en el flashbacks, estaba narrando Ann)
Ann: -Bueno, y ya esta.
Todas nos quedamos perplejas.
Yo: -Que bonito, es jodidamente precioso.
Todas dijeron cosas por el estilo, comentaron… y le dijeron que había sentido…

Entonces, llamaron a la puerta… se abrió. Eran los chicos.
Pero faltaba Ryan.

Carol: -¿Dónde esta Ryan?

-Todavía esta abajo durmiendo, se ve que anoche, cojío una buena. –Dijo Justin.

Todos reímos.
Bajamos al salón, íbamos a desay… almorzar. Más bien dicho, ¿Qué serían las tres de la tarde?
Vimos a Ryan en el sillón acostado, seguramente Justin lo pondría después de levantarse él…

Como ninguno sabíamos cocinar mucho, pues hicimos lo típico una tortilla francesa, no lleva muchos ingredientes, y es fácil de preparar.
Justin dijo que me quería ayudar. Que nunca había probado la tortilla y por si estaba buena quería aprender.

Fuimos a la cocina, y empecé a sacar los ingredientes.
Justin: -Bueno, ¿y esa tortilla que lleva? (lo pondré como yo la hago)
Yo: -Pues mira… lleva: huevos, perejil y jamón, pero si quieres le puedes echar salchichas. (nopenseismalxd).

Después de explicarle, que primero se batía el huevo, después se mezclaban los ingredientes… La eché al sartén, y mientras se hacía fuimos al salón un momento.

Estaban intentando despertar a Ryan, pero el se hacía el remolón (gandul, vago).

Chaz, el más ¿gracioso? Creo que se le puede llamar así, cojio un vaso, lo lleno de agua, y fue derramándolo, poco… a poco… encima de Ryan.

-____Ryan-
Chos, los chicos me intentaban despertar, pero me dolía la cabeza, no me acuerdo de lo que hice anoche.
Yo me gire bocabajo, haber si así me dejaban en paz…
Paso mas o menos un minuto, cuando sentí algo frío y húmedo en mi espalda.
No me lo creía. Era agua.
Me levante de golpe, y los vi a ellos riéndose a carcajadas.
-No me hace ni puta gracia, que lo sepáis. –Dije un poco enfadado, y quitándome la camisa.

-____Annie-
Al derramarle Chaz el agua sobre Ryan, se levanto enseguida, y parecía un poco mosqueado. Entonces se quito la camisa. (omaigash, ah y antes una cosa, habéis visto a Ryan, cuanto ah cambiado, aquí os dejo una foto:

Pincha aquí para ver esta foto.

)

Me percaté de que María se había quedado embobada mirando a Ryan.
Oye: -María, ¿te traigo un cubro? –Dije yo.
María: -Emm… ¿qué?
Yo: -Si, si. Para las babas.
María: -¿Qué? ¡No! –Dijo poniéndose roja.
Los demás la mirábamos atentos.
Se nota que le gustaba Ryan.

Yo: -¡Oh dios! –Dije corriendo hacía la cocina.
Todos dijeron ¿¡Qué pasa!?

-Se me había olvidado que tenía la tortilla al fuego. –Dije un poco alterada desde la cocina

La quite del fuego, y vi que Justin venía para ayudarme.
-Justin coje un plato.
El solo se dispuso a dármelo.
-Gracias.
-De nada.
La tortilla la había hecho bastante grande, así que daría para todos.
En total éramos: Carol, Ann, María, Espe, Jeydon, Ryan, Justin, Chaz y yo.

Le pregunté a Justin, donde se encontraba todo, ya que era su casa.
Me lo dijo y las chicas me ayudaron a poner la mesa.
Fuimos contando. Nueve platos. Nueve vasos. Nueve cuchillos. Nueve tenedores. Nueve servilletas.
Les preguntamos que les gustaría beber, y nos dijeron que coca-cola.
Bueno, no hubo impedimento así que para beber coca-cola.

Antes de empezar a comer, me sonó el móvil.
Estaba en la mesita de la entrada. No sabía que hacía allí.

Miré el nombre, y por supuesto era él.
Lo colgué.
Y les dije a los chicos:
-Ahora vuelvo, voy un momento arriba.

Cuando estaba en mi habitación entrecerré un poco la puerta.
Y lo volví a llamar.

Capítulo 16.

·UNREACHABLE. -Capítulo 16.


Yo: Yo me acuerdo, que Ann y Jeydon se fueron después de un rato de empezar a beber, ¿adonde fuiste?
Ann: Bueno… nose como explicarlo.
**
María: -¿Cómo que no sabes?
Ann: -Haber, esqué me da cosilla…
Yo: -Venga, suéltalo.
Ann: -Pues que Jeydon y yo… ya sabéis…
Carol: -Pues no, nose.
Ann: -Mira que puedes llegar a ser tontilla, tía.
Yo: -Ann… ¿Es lo que yo estoy pensando?
Ann: -Si.
Todas nos quedamos impresionadas, su primera vez.
Espe: -¿Y como fue?
Ann: Bueno… pues…

•FLASHBACK;
………………………………………
-____Ann-
Estábamos en la playa, y empezamos a beber, yo creo que Jeydon se pasó un poquillo.
Jeydon me propuso dar una vuelta.
Acepté.
Mientras íbamos por la playa, había como una cuevita, ni muy grande, ni muy pequeña, la luz de la luna era la que la podía hacer visible por dentro.
Nos adentramos. Es preciosa. Tenía como un pequeño estanque en el medio, rodeado por una fina arena, de color beige, en fin, precioso, nos acostamos… y era como un pequeño cráter que dejaba a la luz, la luna y las estrellas.
Estábamos en el suelo, sobre la arena, yo tenía la cabeza en su pecho, y teníamos nuestras piernas entrelazadas.
Silencio.
Más silencio.
Paso un rato, como antes, no comentábamos nada, era una situación incomoda, además de estar un poco borrachos.
Jeydon me empezó a besar, ¿cómo decirlo?, increíble.
Metió sus manos por debajo de mi camisa, y me la saco totalmente.
Después yo hice lo mismo con la suya, dios, de cara era lindo, pero de cuerpo... aún más.
El me quitó los pantalones, quedándome en ropa interior.
Se puso encima de mí y yo le quite los pantalones como pude, ya que es un poco difícil en esa postura.
El me quito el sujetador. Joder. Me daba un poco de vergüenza, ya que se veía todo por la luz de la luna.
Le quite los boxers, que en la parte superior decía: Jwale.
Y el me termino de quitar a mi la braguita que nos faltaba, empezamos de nuevo a besarnos, iba bajando al cuello… Y se quedaba embobado mirando mis pechos.
Se quedo como diez segundos mirándolos.
Yo: -Hey, ¿estas aquí? –Dije, moviendo la mano delante de su cara.
Jeydon: -Emm, s-si, si… perdona.
Yo: No pasa nada.
Esas tres palabras, fueron las indicadas para que volviéramos a besarnos, esta vez con mucho más movimiento…
Cuando íbamos a dar el ‘paso’, no se si me entendéis.
Preguntó:
-Ann, ¿estas segura?
Solo asentí, los dos teníamos la respiración acelerada, seguramente, de tantos besos, y del calor que desprendían nuestros cuerpos.

Acto seguido, entro en mí.
Lo sentía, todo, todo, todo, dolor… demasiado dolor.

Jeydon: -¿Te duele? ¿Paro?
Yo: -N-o…no…
Aunque le dijera que sí, es normal, la primera vez siempre duele.

Después el dolor se pasó a placer, los dos soltábamos pequeños gemidos.
Yo: -Más.
Y empezó, con un poco de más fuerza, como más rápido y con movimientos más abrumadores, eran sensaciones que yo nunca habría experimentado.

Después de un rato, estar así, ¿Cuánto pasamos? 10 o 15 minutos, paramos, una oleada de cansancio, debilito nuestros cuerpos haciendo que paráramos…
Me acosté a su lado, con la cabeza en su pecho, estábamos los dos un poco sudados…
Estuvimos reponiendo fuerzas, hasta que me dijo:
-Esto nunca lo olvidaré, eres perfecta. Te quiero.
Y me dio un beso en la frente.

Capítulo 15.

·UNREACHABLE. -Capítulo 15.


-Si lo querías saber, no haber bebido tanto, bonita. –Dijo, mientras me pellizcaba el cachete, cojía su taza de leche, y se iba al salón.
**
Espera, ¿Qué acaba de ocurrir aquí? … no me lo quería decir, ¿será por algo?
No, no creo.
Lo que si sabía era que alcohol, cero en un tiempo.

Fui al salón y vi como Justin despertaba a los demás. Si. Con el pie, moviéndolos. Con el típico movimiento de un lado para otro.

Lo deje con sus cosas, Y me fui a la habitación. Todavía con la taza en la mano, un poco caliente estaba.
Pero estaba bien.

Entré en la habitación, y las chicas ya estaban despiertas, pero todas en la cama de matrimonio, donde yo había dormido con Espe.
Estaban hablando, todas como en un círculo.
Estarían hablando de lo que hicimos cada una anoche.

Cuando me vieron entrar todas me dejaron un huequito para sentarme.
Pero primero deje la taza en una mesita que había por ahí.

Me senté.
Todas me miraron como en un interrogatorio.
María: Venga, empieza a hablar. –Dijo mirándome.
Yo: -¿De qué?
Ann: -Oh, venga… no te hagas la tonta. ¿Qué paso con Justin?
Yo: -¿Con Justin?
-Asintieron.
-Que yo me acuerde no hicimos nada, más bien no me lo ah querido decir.
Carol: -Eso es que paso algo…
Espe: -Seguro.
Yo: -Y tú que Espe, que te estabas liando con Chaz. –Y arquee las cejas, más o menos así ê.ê.
•Espe se puso roja, como un tomate.
Espe: -Emm… nose… estábamos un poco pedo, ya sabéis…
Carol: -¿Pero te gusto? O incluso, ¿Te gusta Chaz?
Espe: nose, creo que si. –Dijo aún todavía más roja que un tomate.
Yo: -¿Y porque nose lo dices?
Espe: -Porque no. ¿Y si me dice que no? No lo soportaría. ¿Cómo le miraría a la cara?
Yo: -Pues el que no se atreve, nunca tiene logros en la vida.
María: Alá, que profundo te ah salido eso.
-Reímos.
Seguimos con la conversación hasta un buen rato.
Yo: Espera, espera, espera, espera, un momento chicas.
¿Qué? –Dijeron al unísono.
Yo: Yo me acuerdo, que Ann y Jeydon se fueron después de un rato de empezar a beber, ¿adonde fuiste?
Ann: Bueno… nose como explicarlo.